18 abr 2012

Legión (Legion)


Si ya habéis visto esta película y me decís que es mala, no os lo voy a discutir. Pero, a pesar de sus fallos, a mí me gusta bastante. Así que, si no la habéis visto, dejadme que os diga porque me parece una película que vale la pena ver.

Legión (Legion, Scott Charles Stewart, 2009) es una película tontorrona que mezcla terror y acción. Y una de las razones por las que me gusta es por cómo mezcla elementos de diferentes géneros. Pero empezando por el principio, la historia resulta de por sí deliciosamente absurda: Dios se ha cansado de las tonterías de la humanidad y decide hacer limpieza y empezar el Apocalipsis. Para evitar su redención, decide empezar masacrando a la madre del salvador, Charlie (Adrianne Palicki), en ese momento embarazada a punto de parir, junto a todos los pobres desgraciados con los que se encuentra en ese momento. Para evitarlo, el ángel Miguel (Paul Bettany) se rebela y decide plantar cara a las legiones de poseídos por ángeles enviados por el Señor. Sí, aquí los malos son Dios y sus ángeles.

Todo esto está explicado sin una gota de ironía. Completamente en serio. Esta seriedad resultó para mí tremendamente refrescante porque, cuando la ví, estaba ya un poco cansado de películas que continuamente le guiñaban el ojo al espectador como diciendo "sabemos que esto es una tontería pero lo hacemos por reírnos un rato". Me gustó el hecho de que esta película se tomase en serio lo que estaba haciendo y eso hizo que para mí fuese más entretenida y divertida de ver. En cierto sentido, tiene un espíritu más puro de auténtica serie B que muchas películas recientes que pretendían homenajear la serie B. Más puro porque las películas originales de serie B (antes de que fuesen posmodernizadas) se hacían en serio. Me refiero a films como La masa devoradora (The Blob, Irvin S. Yeaworth, 1958), El pantano diabólico (Attack of the Giant Leeches, Bernard L. Kowalski, 1959) o Creature with the Atom Brain (Edward L. Cahn, 1955).

La película transcurre en un restaurante de carretera en medio del desierto, poblado por personajes típicos del cine de terror. Estos personajes ya los hemos visto antes en incontables películas, pero los y las interpretes son lo bastante buenos para que este hecho no sea demasiado molesto. Cuando empieza el asedio, la ambientación cobra vida, con el pequeño restaurante rodeado por legiones de poseídos. Esto le permite a la película toques divertidos como abuelitas asesinas, niñitas asesinas y un vendedor de helados que parece una araña humana que le añaden colorido al film. Tal vez Charles Stewart no sea un guionista precisamente brillante, pero me gustó el suspense y la tensión que se construye durante el asedio, así como las escenas de acción están bien dirigidas.

Resumiendo, me gusta por la mezcla de géneros, la ambientación y lo delirante de la historia, pero admito que no es objetivamente hablando una buena película. Llamadlo "placer culpable", me gusta por la suma de sus fallos, no por su genialidad. Así que si os la encontráis por ahí, haciendo zapping o en el videoclub, dadle una oportunidad. Quién sabe, a lo mejor tenéis tan mal gusto como yo y también os gusta.

2 comentarios:

Mustangcillo dijo...

Aunque no tenga mucho que ver con el contenido del texto, he de decirte que me encanta esa forma de pensar de "no te voy a discutir que la peli es mala, pero a mí me gusta". ¡Será por pelis malas pero absurdamente divertidas que nos hemos visto! Je, je.

Mira que me mantenía alejado de esta película porque algunas personas me la definían como si fuera el anticine, o algo similar...

Dios es malvado. Esta peli no hubiera pasado la censura española de la época de Franco, jaja.

"sabemos que esto es una tontería pero lo hacemos por reírnos un rato". Completamente de acuerdo. Para ver pelis así me pongo una de la Troma y fuera. Me ha encantado esa comparación que has hecho de esta película con "The Blob", en el sentido de peli con argumento ridículo que se toma en serio a sí misma.

En cuanto al resto de tu comentario... Menudo delirio de película. Me la veré sí o sí XD. A ver si alguien me la presta, dudo que pague por ella (al menos a corto plazo, porque me he acabado comprando cada bizarrada cinematográfica...)

Raúl Calvo dijo...

Yo es que soy así, admito que hay cosas muy malas que me gustan y no me voy a disculpar por ello ni tampoco pretender que son lo que no son.

Y a mí, cuando algo me dicen que es malo, malísimo y no lo vea, me entran ganas locas de verla! La cantidad de gente que me dijo que Carretera Perdida, 2001 o Johnny cogió su fusil eran truños "que no se entendían". En palabras del filósofo contemporáneo Raphael: ¡qué sabe nadie! :D