16 may 2012

Phenomena


Phenomena (Dario Argento, 1985) es uno de los films más curiosos y esotéricos de Argento. En él se dan cita elementos presentes en los films anteriores del maestro del giallo, mezclados de forma harto curiosa. Es también uno de los films más queridos por el propio Argento, aunque en su momento no fue muy apreciada, ya que el público estaba más interesado en ver un thriller "normal y corriente", pero con el tiempo se ha ganado el aprecio que se merece.

Jennifer Corvino (Jennifer Connelly) es la hija de un actor famoso que llega a un internado femenino situado en una peculiar zona de Suiza, donde en esos momentos un misterioso asesino se dedica a masacrar chicas jóvenes. Jennifer tiene una habilidad innata para comunicarse con los insectos, a esta extraña habilidad se le sumará, en cuanto llegue a esta escuela, unos sueños telepáticos en los cuales es testigo de los brutales asesinatos que en ese momento tienen lugar en la zona. Con la ayuda del profesor John McGregor (Donald Pleasence), Jennifer intentará averiguar la identidad del asesino.

A pesar de que la banda sonora consistente en canciones heavies se puede hacer bastante pesada (a no ser que seas un fanático de este estilo musical), Phenomena resulta un film absorbente por la gran cantidad de peculiares elementos que mezcla, en una historia que, como es habitual en el cine del maestro, podría ser bastante vulgar de no ser por la surrealista manera en que Argento nos la presenta.

Como he dicho al principio, en el film se mezclan diversos elementos que habían aparecido ya en el cine de Argento. Este film es una especie de cuento de hadas, y se nos indica que es así con la utilización de una voz en off al principio muy semejante a la que aparece al principio de Suspiria (1977). La ambientación en el internado femenino recuerda también a la de la primera entrega de la trilogía de Las Tres Madres, consiguiendo aquí Argento utilizar actrices realmente jóvenes (15, 16 años) para enfatizar la sensación de oscuro cuento de hadas, cosa que no pudo hacer en Suspiria por presiones de los productores. Los elementos paranormales que asoman tímidamente en Rojo oscuro (Profondo rosso, 1975) son aquí protagonistas en el personaje de Jennifer Connelly.

También está muy presente en el film la pasión e interés de Argento por los animales e insectos, así como su amor por los trabajos de Edgar Allan Poe, haciendo referencias muy claras al clásico de Poe Los crímenes de la Rue Morgue. A todo esto se le añade un tramo final con elementos del grand guignol que redondea de forma ideal el conjunto.

Y los indispensables crímenes sangrientos y brutales, por supuesto.

Creo que a pesar de los muchos elementos extraños que se dan la mano en este film y de lo surrealista que es el conjunto, es una de las películas más accesibles de Argento para aquel que no lo conozca, ya que no es tan brutal y retorcido como otros filmes del maestro y su aspecto de cuento de hadas para adultos puede hacer que interese a otros espectadores que no son los habituales de su cine. Es también uno de los últimos grandes films del maestro, antes que la llegada de los 90 con el recorte de los presupuestos que tenía disponibles afectara la calidad de su trabajo.

Una película que recomiendo a todo el mundo, aunque intuyo que no le gustará a todo el mundo. Por cierto, si aún no la habéis visto, aseguraos de que sea la versión original del director, ya que fue un film muy censurado y recortado por los distribuidores.

7 comentarios:

Javier Simpson dijo...

Creo haberla visto en el cine en su estreno, pero no me acuerdo de casi nada. Igual la vuelvo a ver que la tengo por aquí. Argento no me entusiasma, pero no deja de ejercer cierta fascinación en algunas de sus pelis por lo rebuscado que es y lo original (aunque no siempre) que lo hace.

Un abrazo, Raül. Magnífico el post.

Dr. Gonzo dijo...

Esta película la recuerdo con especial cariño por ser la primera película de Argento que vi.
Además de encantarme, me llamó la atención el uso de la música de Iron Maiden, y lo mucho que desentona jaja

Raúl Calvo dijo...

Javi, ¿cómo no te va entusiasmar Argento? De acuerdo que en los 90 ya no es lo que era, pero del 87 para atrás nos ofreció grandes tours visuales. La cuestión es no fijarse en los argumentos, que son absurdos la mayoría, y quedarse con la poesía visual.

Dr. Gonzo, sí la música desentona bastante! Yo no fue la primera que vi pero sí una de las primeras de Argento (la 4 o 5 seguro) porque se encontraba de forma más o menos fácil en el videoclub.

Einer dijo...

A mí me gusta mucho esta peli aunque no tanto como Rojo oscuro o Suspiria. Lo que más me gusta es el uso de los insectos en las investigaciones policiales, que es precisamente lo que inspiró la película. Bueno, no, lo que más me gusta es Jennifer Connelly, que parece fue recomendación del gran Sergio Leone.

En cuanto a la banda sonora, el problema no es Iron Maiden, que tiene una presencia testimonial, es que es una BSO olvidable.

Raúl Calvo dijo...

Hombre, es que Rojo oscuro y Suspiria son peliculones espectaculares. Sí, Connelly fue recomendad por Leone, que la acababa de dirigir en Érase una vez en América. Argento y Leone eran amigos desde Érase una vez en el Oeste. Y a mí la Connelly también me gusta, pero entonces tenía 15 años! Qué os pasa últimamente, que entre la Connelly y la Chloe Moretz os estáis aficionando a las niñas!

Roger dijo...

La banda sonora de Goblin y Simon Boswell a mi si me gusta, me gusta menos cuando aceleran el tema central (sospecho que obra de Goblin) pero aun así acompaña muy el tono de cuento fantástico.

Argento es un maestro estoy de acuerdo pero ¿qué pasó con La terza madre y Giallo? Me llevé una tremenda decepción con la primera y no solo por el aspecto técnico. Tenía la sensación de estar viendo algo lleno de buenas intenciones pero que nadie parecía querer ver que estaba siendo un desastre. Y la segunda considero que no está tan mal. Pero si heché de menos un final mejor.

Raúl Calvo dijo...

Es que Goblin y Boswell sólo tenían un tema, el resto son todo canciones de heavy que rompen con la atmósfera de cuento de hadas, pero el material de Goblin sí es bueno.

El problema con sus últimas pelis es primero que ya no dispone del dinero del que disponía en los 70 y 80 para hacer pelis, lo que le obliga a recortar los primeros borradores. Además en Giallo no tenía ningún control sobre el producto final.